La Religión en Cuba

Debido a los diferentes modelos socioculturales que se establecieron en el país y que aportaron distintas formas de expresividad religiosa, el fenómeno religioso cubano es heterogéneo, con destacada presencia de sincretizaciones.

Modelos socioculturales que conforman el mundo religioso cubano  

El Modelo aborigen: Es el primero y el más antiguo, del cual quedan algunas huellas en nuestra religión.

El Modelo Español: Estableció el catolicismo con carácter hegemónico, a partir de la conquista y la colonización.  

El Modelo Africano: Aporto distintas formas religiosas tales como:

 La regla de Ocha de origen yoruba, la regla conga de ascendiente bantú y   sociedades secretas masculinas abacuá o ñañigos.

El Modelo Norteamericano: Importó el espiritismo y el protestantismo.  

Otras influencias: Vodú haitiano (traído por braceros haitianos inmigrados al país). Creencias y prácticas religiosas traídas por campesinos chinos contratados en la isla e inmigrantes de nacionalidad hebrea que instituyeron el judaísmo con organizaciones y sinagogas.

La religión yoruba en Cuba

Con la llegada del esclavo africano a Cuba, la identidad religiosa no se desvaneció, tan solo se transformó para afrontar las presiones sociales del Nuevo Mundo. El catolicismo, con sus numerosos santos patrones favoreció dicho mecanismo, el cual es llamado  sincretismo religioso.

Pondremos como ejemplo de ello la misa espiritual: los yorubas rinden tributo a los espíritus y a los antepasados, pues consideran que fueron una pieza importante en la constitución de la familia y la cultura, y porque además están seguros que desde el mundo de los muertos ellos continúan escuchando, aconsejando y ayudando. Tal costumbre espiritual se sincretizó con la misa católica. Es lo que popularmente llamamos misa espiritual. Este acto tiene como finalidad comunicarse con los espíritus.  El elemento católico se aprecia en las oraciones y los textos de las canciones que se hacen en estas ceremonias. La mesa espiritual está presidida por la cruz y vestida con una tela blanca. Se le coloca una copa y seis vasos de agua, representativos de las distintas comisiones espirituales que se comunicarán en la misa. Dos velas blancas, varios puros, flores, agua, colonia y uno o varios mediums, que serán los encargados de establecer  contacto con las almas difuntas. Se dirán oraciones y cánticos, y los reverenciados expresarán sus mensajes y consejos. Realizar una misa espiritual tiene como finalidad mejorar y desarrollar la salud,  así como encausar las energías positivas. Según la religión yoruba, muchos de los problemas que agobian a los seres humanos tienen su origen en el desconocimiento de este camino. No atender este mundo es faltar a una de las reglas fundamentales de la religión yoruba: “Ikú lobby ocha” (el muerto parió al santo.)